#TESTIMONIO: Xavier, un transportista entre Lille y París

Xavier pasa tiempo en su Volkswagen entre Lille, donde vive, y París, donde trabaja como informático. Desde principios de año, utiliza Cocolis y reembolsa sus peajes y gran parte de su diésel transportando paquetes.

Xavier tiene el reflejo Cocolis, nos lo cuenta.

¿Cuáles son los trayectos que realizas frecuentemente? ¿Y en qué ocasión?

Vivo en Lille y trabajo en París. Es un viaje que hago casi una semana sí y otra no.

¿Cuál fue tu principal motivación para usar Cocolis?

Es principalmente para rentabilizar mis trayectos. Además, es una oportunidad para conocer gente simpática.

¿Con qué viajan los paquetes y tú?

Un Volkswagen Polo.

¿Qué tipo de paquetes transportas? ¿Te has encontrado con algún paquete inusual?

Un poco de todo: en particular cajas de cerveza (N. del E.: todo amante de la cerveza debe ir a Lille). Pero lo más inusual fue una gran letra decorativa de letrero.

¿Cómo conociste Cocolis?

En su momento, una empresa que también ofrecía transporte compartido de paquetes (pero en África) me contactó para hacer su sitio web. Aunque el proyecto no prosperó, me tomé el tiempo de descubrir el mundo del transporte compartido de paquetes y me inscribí en Cocolis. Finalmente activé mi cuenta al recibir una pequeña noticia de Eliette. Y desde entonces, tengo el reflejo Cocolis para mis idas y vueltas París-Lille.

¿Qué opinas del concepto?

Para mí es la extensión perfecta de Wallapop. De hecho, fue una cama comprada en Wallapop.es la que transporté la primera vez. Sobre todo, es fiable (el paquete no se tira en medio de otros 36 paquetes).

Y es más flexible que Blablacar, que también uso a veces. Pero con Cocolis, los horarios son más flexibles, más adaptados a mi ritmo.

Si tuvieras 3 palabras para definir Cocolis, ¿cuáles serían?

ECONÓMICO, FIABLE, EFICAZ

¿Cocolis te ha permitido hacer buenas amistades?

La gente siempre es muy simpática. Para algunos paquetes, como las cajas de cerveza, suelo ver a los destinatarios varias veces; eso crea un vínculo. Cuando los entrego, es en una calle muy pequeña, de un solo sentido y no puedo quedarme allí. La próxima vez, me aparcaré en otro sitio para degustar una cervecita con ellos.

Buena degustación, Xavier. En tu próxima visita a París, ven a brindar con nosotros.🍻